EXPERIENCIAS CON LA COMIDA SÁTVICA

IMG_2784_smlSomos lo que comemos. El Yoga Clásico considera tremendamente importante el concepto de Ahara -Dieta, comida-. De hecho, Patanjali en los Yogas Sutras no desarrolla los detalles de Ahara Sátvica, porque estos están relatados en el Hathayogapradipika.

En el 2004, enfermé debido a la contaminación existente en Mumbai, que está repleta de factorías químicas. El síntoma más visible fue un gran nódulo linfático que apareció en la base de la mandíbula. Después de un par de semanas recurriendo a la medicina alopática y a pesar de tener un diagnóstico, decidí no continuar con las pruebas y los medicamentos. Empecé a leer los libros de Shri Yogendra y empecé a experimentar con cambios en la comida y los hábitos de mi estilo de vida. Comencé una profunda reflexión sobre los motivos por los cuales había caído enfermo y lo que debía hacer si no quería volver a estar así. Este fue el gran cambio de mi vida. Tras unos pocos meses, me curé completamente y fui capaz de validar y experimentar cada punto descrito por los yoguis sobre Ahara.

Desde entonces han transcurrido ocho años y continuo haciendo este dieta sátvica, que me aporta enormes beneficios a nivel físico y mental. Por este motivo, quiero compartir mis observaciones sobre esta experiencia.

Los diferentes alimentos que el yoga recomienda son la leche, las frutas, frutos secos, semillas, vegetales, hierbas aromáticas, cereales, germinados y legumbres.
Se puede hablar de diferentes aspectos a la hora de elegir la comida. En primer lugar, la comida debe ser fresca, integral, pura – de cultivo ecológico, no modificada genéticamente-, agradable de sabor y fácilmente digerible. Todos estos aspectos son importantes, pero ahora me centraré en el sabor. Instintivamente nosotros nacemos con predominancia del sabor dulce. Si observamos a un recién nacido, su primera comida es la leche materna que es dulce y no puede ingerir alimentos salados hasta los cuatro meses. Los textos yóguicos hablan sobre el sabor y dicen que los “alimentos que son ácidos, amargos, astringentes, muy picantes y muy calientes están prohibidos”. En la actualidad, la dieta moderna se utiliza masivamente la comida precocinada, congelada o cocinada a muy altas temperaturas -por ejemplo los fritos- y con conservantes, colorantes y aditivos estimulantes del sabor. De esta forma, nuestro sentido del gusto está constantemente sobrestimulado y además, no aplicamos el principio de la moderación. Los sabores naturales presentes en los alimentos integrales son mucho más suaves y equilibrados, pero no somos capaces de apreciarlos o disfrutarlos. Las personas nos hemos habituado a unos niveles antinaturales de azúcar, sal y picantes, que nos hacen no disfrutar con los verdaderos sabores naturales.

Cuando comencé con mis cambios, me encontré con ese problema de los sabores, pero seguí haciendo mi experimento con total fe. Una vez que dejé de comer azúcar, sal, aceite y picantes, mi gusto fue cambiando a lo largo de varias semanas y comencé a apreciar el verdadero sabor natural de los alimentos. Progresivamente fui descubriendo los diferentes sabores de los vegetales, descubriendo que algunos eran más dulces y otros más salados. También observé que son más sabrosos si se consumen cuando son pequeños y poco cocinados y que los productos ecológicos tienen más matices en los sabores. También descubrí el sabor dulce de cereales y lentejas, así como del arroz, trigo y cebada integrales.

¿Cómo se puede realizar el cambio? La buena noticia es que el sentido del gusto se puede volver a “restaurar” para disfrutar de los sabores naturales, sencillos. Es cierto que se necesita mucha paciencia y Abhyasa. En las primeras semanas después de hacer cambios, noté que la comida no tenía sabor, pero poco a poco mi sentido del gusto se fue transformando e volví a disfrutar e identificar los sabores naturales, prefiriendo aquellos que son más dulces.

En conclusión, la comida sátvica es muy agradable y beneficiosa, una vez que uno es capaz de resistir las primeras semanas del cambio. Recuerda que el primer paso es la fuerza de voluntad y después la experiencia con la comida sátvica será muy gratificante.

Vishal Jaiswal

Yoga & Total Health.

Más información en inglés: THE YOGA INSTITUTE

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